¿Cómo distinguir una relación saludable de una relación tóxica?

¿Cómo distinguir una relación saludable de una relación tóxica?

noviembre 4, 2020 0 Por comunicados

El respeto por uno mismo y por los demás es una característica clave de las relaciones saludables. Por el contrario, en las relaciones no saludables, una de las dos partes siempre intenta ejercer control y poder sobre el otro, bien sea de forma física, sexual y/o emocional. Conocer estas diferencias puede ayudarte a tomar decisiones críticas en tu relación.

¿Cómo es una relación saludable?

En las relaciones saludables, las personas pueden sentirse seguras, respetadas y aceptadas por lo que son.

Señales de una relación saludable:

  • Puedes ser tú mismo: Debes sentirte cómodo con la persona con la que estás saliendo. Cambiar aspectos de ti mismo para complacer a la otra persona no funcionará a largo plazo y puede llegar a frustrar a tus amigos y familiares, por lo que es importante que siempre mantengas tu esencia.
  • Honestidad: Te sientes cómodo hablando de cosas en la relación, incluyendo problemas o inquietudes.
  • Buena comunicación: Hablan de las cosas que son importantes para ambos. Se preguntan lo que están pensando, sintiendo y se escuchan mutuamente.
  • Respeto: Ambos se tratan con dignidad y no hacen cosas para incomodar a su pareja.
  • Seguridad: Si te sientes amenazado de alguna manera cuando estás con tu pareja, entonces no tienes una relación saludable. La seguridad implica tanto la parte emocional como la física.  Es importante tener la certeza de que tu pareja no tratará de herirte emocional ni físicamente.
  • Confianza: La confianza se trata de poder contar con alguien. Debes saber que esa persona será honesta contigo y que cumplirá todas sus prometas. Cuando confías en alguien, sabes que te apoyará y cuidará de ti.
  • Igualdad: La igualdad mantiene estable a las relaciones. Por ejemplo, ser igual en una relación significa compartir el poder, no mandarse unos a otros. La igualdad también puede significar compartir el esfuerzo. Si envías mensajes de texto constantes o llamas a tu pareja y no te responde, tu relación podría estar desnivelada.
  • Apoyo: El apoyo es sobre sentirse cuidado y respetado. En las relaciones saludables, las personas se escuchan entre sí, se ayudan con los problemas y se muestran apoyo asistiendo a eventos importantes.
  • Lidiar con las dificultades: Es saludable discutir de vez en cuando. No estar de acuerdo te da la oportunidad de explorar diferentes perspectivas y te ayuda a expresar tus sentimientos. Es un problema si están discutiendo todo el tiempo o si se dicen cosas hirientes. También es importante recordar que las peleas físicas NUNCA están bien.
  • Autoconfianza: Cuando las personas confían en sí mismas, pueden mejorar sus relaciones interpersonales. Demuestran que están lo suficientemente tranquilos y cómodos con sus ideas y sentimientos como para permitir que otros expresen sus opiniones sin tener que imponerse.
  • Relaciones sexuales sanas: Las parejas deben tener relaciones sexuales en las que ambos se sienta a gusto y ninguno de los dos se sienta presionado u obligado a participar en una actividad sexual que este fuera de su zona de confort. 

Si no encontraste muchos de estos aspectos en tu relación actual, debes empezar a reconsiderar estar juntos. Probablemente no hay nada que puedas hacer para mejorar la situación y ni siquiera los mejores amarres de amor y pareja podrán salvarlos del fracaso inminente. Las relaciones poco saludables están marcadas por características como la falta de respeto y el control. Es importante que todas las personas puedan reconocer los signos de relaciones poco saludables antes de que se intensifiquen.

Algunas de las características de una relación tóxica son:

  • Maltrato físico: Tu pareja te empuja, golpea o rompe tus cosas.
  • Control: Tu pareja te dice qué hacer, qué ponerte o con quién puedes pasar el rato. Constantemente te vigila y te amenaza para asegurarse de que cumplas con tu palabra.
  • Humillación: Tu pareja te insulta, te menosprecia o te hace sentir mal delante de los demás.
  • Cambios de humor repentinos: Tu pareja se enoja fácilmente y no sabes qué lo hará explotar. Te sientes como si estuvieras caminando sobre un campo minado.
  • Presión: Te presiona para que hagas cosas que no quieres hacer o para las que no estás preparado como tener relaciones sexuales o consumir drogas y alcohol. No aceptan un “no” por respuesta y recurren a las amenazas o ultimátums.
  • Deshonestidad: Tu pareja te miente o te oculta información.
  • Falta de respeto: Tu pareja se burla de tus opiniones e intereses.
  • Dependencia: Tu pareja dice que no puede vivir sin ti y te amenaza con hacerse daño físico si intentas terminar la relación.
  • Intimidación: Tu pareja intenta controlarte haciendo que te sientas temeroso.

Es importante educar a los jóvenes sobre el valor del respeto y las características de las relaciones saludables y no saludables antes de que empiecen a tener citas. Si esto no se hace, es posible que en su adultez no estén equipados con las habilidades necesarias para desarrollar y tener relaciones sanas ni para terminar con relaciones tóxicas.